Quienes somos

 

Situada en el corazón del puerto pesquero, la Cofradía de Pescadores se encuentra en un lugar único y emblemático de Cartagena. A los pies del Barrio de Santa Lucía, nuestra Cofradía da la bienvenida al mar  a toda una ciudad milenaria.

 

Es una corporación de derecho público, sin ánimo de lucro, con personalidad jurídica propia y plena capacidad de obrar para el cumplimiento de sus finalidades. Dicha entidad está constituida por tiempo indefinido y ejerce la representación del sector pesquero en el ámbito territorial de la ciudad de Cartagena.

 

La Ley 3/2.001, de 26 de marzo, de Pesca Marítima del Estado regula estas entidades que son definidas como “corporaciones de derecho público, sin ánimo de lucro, representativa de intereses económicos, que actúan como órganos de consulta y colaboración de las Administraciones competentes en materia de pesca marítima y de ordenación del sector pesquero”.

 

Esta Ley, en su artículo 47, regula las funciones de las Cofradías de Pescadores, siendo estas recogidas en los siguientes puntos:

 

1. Actuar como órgano de consulta de las Administraciones públicas competentes y ejercer las funciones que encomienda la Administración General y la Comunidad Autónoma.

 

2. Prestar servicios a sus miembros, representando y defendiendo sus intereses económicos y sociales ante los diferentes organos que toman decisiones sobre la gestión del sector pesquero.

 

3 . Administrar los recursos propios de su patrimonio. Con el fin de realizar un correcta gestión y explotación de los recursos que dispone dicha entidad.

 

Los órganos representativos de la Cofradía se pueden dividir en tres: La Junta General, órgano que representa los diferentes sectores del sector pesquero y que es elegido por los cofrades, el Cabildo, encargado de la gestión y administración de la entidad, y el Patrón Mayor, máximo representante de la Cofradía.

 

La Cofradía de Pescadores continúa defendiendo los intereses de toda una ciudad, garantizando pescado y marisco de calidad a diario y siendo parte del disfrute de propios y extraños a través de su mar de sensaciones.